Artes de Entrenamiento...

- - - - - " En la actualidad Respuesta Existencial, es una propuesta de acompañamiento desde la logoterapia, en forma personalizada para descubrir tu sentido vital. La educación de la Conciencia, a través de la Acción, es un proceso que sostenemos para pequeños grupos, en ámbitos educativos, o laborales. En cada acción, ofrecemos una respuesta al mundo. Somos llamados a responder desde nuestra existencia. La práctica engendra el autoconocimiento y el desarrollo del liderazgo. Promovemos una sociedad sin espíritu de provecho, basada en la “Sabiduría de la no dualidad”....Armónica, ética, íntegra y comprometida con la comunidad global." - - - - -

jueves, 29 de abril de 2010

Haiku

El Haiku es una de las más importantes formas poéticas de la poesía japonesa. Tradicionalmente está formado por tres versos de cinco, siete, y cinco sílabas respectivamente. Y otra de sus características esenciales es que suele haber en el poema una referencia explícita a las estaciones del año, por ejemplo, en el invierno: nieve; en el otoño: hojas, o en primavera: flores. Pero no siempre esta palabra que hace referencia explícita a las estaciones, y que se denomina kigo es tan obvia, y este hecho forma parte de su encanto.
En cuanto a la temática, el haiku trata de describir de forma breve y sencilla una escena vista o imaginada. Según Basho, que fue considerado el padre del género, “un haiku es simplemente lo que está sucediendo en ese lugar en ese momento”, y, de hecho, algunos de los haikus más emocionantes o hermosos describen situaciones cotidianas, y lo hacen de una forma en la que el lector vive una experiencia totalmente nueva a partir de una situación ya conocida. Con solo tres versos y a través de la observación, los poetas japoneses han sabido expresar a la perfección su relación con la realidad a la vez que la han dotado de un sentido eterno o de trascendencia.
En este poema, de Matsuo Bashô (1644-1694), tenemos un buen ejemplo de ello:
Este autor supo elevar esta composición al rango de arte, con él el haiku alcanzó la espiritualidad, la trascendencia...En 1986 compuso el haiku más famoso de la literatura japonesa, que resume perfectamente el espíritu del haiku:
Un viejo estanque;
Se zambulle una rana,
ruido de agua.

Un poema en el que el poeta hace confluir lo eterno (el agua del viejo estanque) con lo instantáneo (el salto de la rana), valiéndose de un lenguaje sumamente sencillo y conciso.

viernes, 23 de abril de 2010

Hara.

En el hemisferio occidental normalmente al cuerpo se lo considera apenas como un recipiente, las más de las veces como un obstáculo al crecimiento interior, incluso como “el pecador”, y casi nunca como uno de nuestros más valiosos instrumentos para “ser”. En la perspectiva oriental, no es posible alinearse con la naturaleza esencial sin alinearse primero con el cuerpo, experimentándolo plenamente, tomando consciencia de sus zonas más recónditas, de sus reacciones y actitudes, de sus crispaciones, hasta que responda también a la dirección de la naturaleza pura y esencial del hombre. Y para los japoneses, este alineamiento pasa necesariamente por el centramiento en el Hara, centro energético de anclaje fundamental para cualquier práctica. El Hara es considerado como un núcleo de energía infinita no contaminada de ego, una suerte de centro-raíz que nos conecta con la totalidad de nosotros mismos, de modo tal que cualquier práctica o actividad que desarrollemos arraigados en él será realizada según el curso que debe suceder, sin intromisión de nuestros deseos o expectativas. Desde ese anclaje de libertad respecto del ego nos podemos entregar plenamente a la actividad en el momento presente. Lograr vivir permanentemente los actos cotidianos centrados en el Hara nos permite estar en el mundo sin pertenecer a él, actuar en el mundo sin identificarnos con el objetivo de nuestra actuación; realizar sin esperar el fruto de la acción. Paradójicamente, se dice que K. G. Dürckheim es el autor del primer –acaso único- libro acerca del Hara, centro energético acerca del cual los japoneses tenían un conocimiento previo milenario.

viernes, 9 de abril de 2010

El espejo del Kyudo

Como una parte del mutuo intercambio de enriquecimiento cultural entre Oriente y Occidente, el Kyudo tiene mucho que ofrecer. No solo representa muchos lazos de cultura y tradición sino que se dirige a aspectos fundamentales del ser humano. Con un aspecto deportivo sin ser un deporte, con un aspecto espiritual sin ser una religión, como una disciplina física pero con un potente poder psicológico y emocional, el Kyudo es difícil encuadrarlo dentro de categorías normales. Pero esta diversidad le confiere una significación para equilibrar las muy diferentes dimensiones de la vida humana dentro de una sencilla actividad. Especialmente en Occidente, donde los aspectos mental, físico y espiritual han llegado a estar tan dislocados, el Kyudo tiene un papel muy especial que jugar....La Diana es el espejo que devuelve al arquero su propio reflejo.

viernes, 2 de abril de 2010

"La Unidad"

La mística no está más allá de Dios y del mundo. La mística es Dios y mundo, una unidad indivisible. Pero esto no significa la abolición de la tensión entre los dos polos. Es la tensión entre un extremo de la vara y el otro. Es la tensión entre mar y ola, entre rama y árbol. Por eso, tampoco se consideran equivalentes Dios y ser humano. El mar se revela como ola.

Uno puede dirigirse separadamente al mar y a la ola, pero su esencia es agua. La mano tiene dos caras. Mirándolas con la razón, habrá que mirar primero una cara y luego la otra. Desde el interior, ambas caras se experimentan como una. Por ello, se trata al mismo tiempo de la experiencia del completo vacío y de la plenitud total. (de W. Jäger. La ola es el mar).

jueves, 1 de abril de 2010

Aiki y Kiai

Kiai y Aiki utilizan el mismo kanji y pueden ser considerados como el interior y el aspecto exterior del mismo principio.
El kanji de "Ai" se compone de tres radicales, "unir", "uno" y "boca". Por lo tanto, "Ai" simboliza las cosas se unen, se fusionan. El kanji para "Ki" representa una olla llena de arroz a vapor y una tapa en ella. Por lo tanto, "Ki" simboliza la energía (en el cuerpo).
Así, el sentido de Aiki es unir o combinar la energía.
Kiai se refiere a la manifestación, a la emisión o proyección de las energías propias, mientras que Aiki se refiere a la fusión de la propia energía con la energía emitida desde una fuente externa (mezcla).
En las artes marciales Kiai significa la unión con nuestra energía interior, al tiempo Aiki es la unión con la energía de un atacante. “Ambos principios forman parte constante del crecimiento y unión interior a partir de nuestro autoconocimiento, y a su vez a nuestra relación, (unión) con los demás”.
Kiai está formado por todas las partes del cuerpo, mente y espíritu unificadas y dirigidas a una intención de plena consciencia espiritual.
Aiki, en última instancia tiene que ver con una muy buena capacidad para integrar nuestro Kiai al entrar en contacto; de forma que la mezcla del propio Ki con el Ki del adversario, sean una misma forma.
Este uso del Ki implicará el uso del poder kokyu, es decir, la respiración que coordina el movimiento perfecto.