Artes de Entrenamiento...

- - - - - " En la actualidad Respuesta Existencial, es una propuesta de acompañamiento desde la logoterapia, en forma personalizada para descubrir tu sentido vital. La educación de la Conciencia, a través de la Acción, es un proceso que sostenemos para pequeños grupos, en ámbitos educativos, o laborales. En cada acción, ofrecemos una respuesta al mundo. Somos llamados a responder desde nuestra existencia. La práctica engendra el autoconocimiento y el desarrollo del liderazgo. Promovemos una sociedad sin espíritu de provecho, basada en la “Sabiduría de la no dualidad”....Armónica, ética, íntegra y comprometida con la comunidad global." - - - - -

viernes, 23 de septiembre de 2011

Medios y fines.

El CAMINO es más importante que la meta.
Porque si el camino es bueno, la META también lo será.
Al mismo tiempo, CAMINAR es más importante que llegar.  
Si caminamos criteriosamente, con seguridad LLEGAREMOS a destino.

Por otra parte, HACER es más importante que lograr algo.
Por que sí actuamos bien, el resultado será sin duda BUENO.

Por último, los MEDIOS son más importantes que el fin, ya que el FIN depende de los medios.
Los medios son importantes porque no sabemos 
cuál será el fin del camino, si exitoso o no, y no tenemos control sobre él. 
 Pero somos responsables de los medios ya que están...BAJO NUESTRO CONTROL.
Swani Shivapremananda.

domingo, 18 de septiembre de 2011

Jiddu Krishnamurti

En 1920
Nace el 12 de mayo de 1895, en Madanapalle, Andhra Pradesh, India  y fallece el 17 de febrero de 1986, en Ojai, California, Estados Unidos, fue un conocido escritor y orador en materia filosófica y espiritual. Sus principales temas incluían la revolución psicológica, el propósito de la meditación, las relaciones humanas, la naturaleza de la mente y cómo llevar a cabo un cambio positivo en la sociedad global.
Krishnamurti nació en la la India colonial, y fue descubierto en 1909, cuando aún era un adolescente, dentro de la Sociedad Teosófica, quienes vieron en él a un posible Líder Espiritual. Sin embargo, rehusó a ser el mesías de un nuevo credo, alegaba no tener nacionalidad, ni pertenecer a ninguna religión, clase social, o pensamiento filosófico. Pasó el resto de su vida como conferenciante y profesor viajando por el mundo y enseñando sobre la mente humana, tanto a grandes como a pequeños grupos. Fue autor de varios libros. A la edad de 90 años dio una conferencia en la ONU acerca de la paz y la consciencia, y recibió la Medalla de la Paz de la ONU en 1984. Su última conferencia fue dada un mes antes de su muerte en 1986.
Su biógrafa Mary Lutyens escribió varias obras acerca de Krishnamurti cuando vivía en la India, Inglaterra, y finalmente en Ojai, California. Lutyens indica que durante algún tiempo Krishnamurti creyó ser el maestro del mundo. La muerte de su hermano Nitya el 11 de noviembre de 1925 a la edad de 27 años a causa de la tuberculosis, hace que deje de creer eso, puesto que había pedido que su hermano no muriera, desilusionándose por completo.
Luego en la obra titulada "El libro de la vida", resume en gran medida el motivo que principalmente impulsó a Krishnamurti a difundir su mensaje: el deseo de liberar al hombre y al mundo.
Si hemos de crear un mundo nuevo, una nueva civilización, un arte nuevo, no contaminado por la tradición, el miedo, las ambiciones, si hemos de originar juntos una nueva sociedad en la que no existan el «tú» y el «yo», sino lo nuestro, ¿no tiene que haber una mente que sea por completo anónima y que, por lo tanto, esté creativamente sola? Esto implica, ¿no es así?, que tiene que haber una rebelión contra el conformismo, contra la respetabilidad, porque el hombre respetable es el hombre mediocre, debido a que siempre desea algo; porque su felicidad depende de la influencia, o de lo que piensa su prójimo, su gurú, de lo que dice el Bagavad Gita o los Upanishads o la Biblia o Cristo. Su mente jamás está sola. Ese hombre nunca camina solo, sino que siempre lo hace con un acompañante, el acompañante de sus ideas. ¿No es, acaso, importante descubrir, ver todo el significado de la interferencia, de la influencia, ver la afirmación del «yo», que es lo opuesto de lo anónimo? Viendo todo eso, surge inevitablemente la pregunta: ¿Es posible originar de inmediato ese estado de la mente libre de influencias, el cual no puede ser afectado por su propia experiencia ni por la experiencia de otros, ese estado de la mente incorruptible, sola? Únicamente entonces es posible dar origen a un mundo diferente, a una cultura y una sociedad diferentes donde puede existir la felicidad”
Krishnamurti otorgaba una singular importancia a la meditación como un medio de eliminar el ego. El 12 de agosto, cinco semanas después de su llegada a Ojai, K. escribió a Lady Emily: “He estado meditando todas las mañanas por media hora o 35 minutos. Medito de las 6.45 a las 7.20. Empiezo a concentrarme mejor, aun cuando sea por poco tiempo, y vuelvo a meditar antes de acostarme, por cerca de diez minutos. Todo esto es más bien sorprendente para usted, ¿verdad? Al principio me fue difícil meditar o concentrarme pero aunque sólo lo he estado haciendo por una semana, estoy gratamente sorprendido…”
Fue solamente cinco días después de escribir esto que él pasó por una experiencia que cambió su vida.
“Desde el 3 de agosto yo meditaba regularmente por cerca de 30 minutos todas las mañanas. He podido, para mi asombro, concentrarme con considerable facilidad.  Entonces, el 17 de agosto, sentí un dolor agudo en la base de la nuca y tuve que reducir mi meditación a 15 minutos. El clímax fue alcanzado el día 19. Yo no podía pensar.
El primer día, mientras estaba en ese estado, y más consciente de las cosas que me rodeaban, tuve la primera y más extraordinaria experiencia. Había un hombre reparando la carretera; ese hombre era yo mismo; yo era el pico que él sostenía; la misma piedra que él estaba rompiendo, era parte de mí, la tierna hoja de pasto era mi propio ser y el árbol junto al hombre era yo. Casi podía sentir y pensar como el hombre que reparaba la carretera, podía sentir al viento pasando a través del árbol, y a la pequeña hormiga sobre la hoja de hierba. Los pájaros, el polvo, y el mismo ruido eran parte de mí. Justo en ese momento pasaba un auto a cierta distancia; yo era el conductor, la máquina y las llantas; conforme el auto se alejaba yo también me alejaba de mí mismo. Yo estaba en todas las cosas o, más bien, todas las cosas estaban en mí, las inanimadas así como las animadas, las montañas, el gusano, y toda cosa viviente. El día entero permanecí en esta bienaventurada condición.
En la mañana del día siguiente ocurrió casi lo mismo que el día anterior. Empecé a volver en mí y, me senté con las piernas cruzadas en la postura de meditación. Cuando había estado así por algún tiempo, me sentí a mí mismo saliendo de mi cuerpo, y me vi sentado abajo con las tiernas y delicadas hojas del árbol encima de mí.
Era muy dichoso, estaba en calma y en paz. Había una calma muy profunda, tanto en el aire como en mí mismo, la calma que existe en el lecho de un lago profundo e insondable. Como el lago, yo sentía que mi cuerpo físico, con su mente y sus emociones podía ser agitado en la superficie, pero que nada, absolutamente nada, podría ya turbar la quietud de mi alma.
Ya nunca nada podría ser igual. He bebido en las puras y transparentes aguas que manan de la fuente de la vida y mi sed fue aplacada. Nunca más podría estar sediento, nunca más podría hallarme en la total oscuridad. He visto la Luz, he tocado la compasión que cura todo dolor y sufrimiento; ello no es para mí mismo, sino para el mundo. He estado en la cumbre de la montaña. Nunca puedo ya estar en completa oscuridad; he visto la gloriosa Luz que cura. Me ha sido revelada la fuente de la Verdad y las tinieblas han sido disipadas. El Amor en toda su gloria ha embriagado mi corazón; mi corazón nunca podrá cerrarse. He bebido en la fuente de la Felicidad y de la eterna Belleza. Estoy embriagado de Dios”. (Los Años del Despertar, Mary Lutyens)

Presentamos un fragmento del encuentro que mantuvieron Krishnamurti y Eugene Schallert, cura Jesuita. En este fragmente mantienen una interesante investigación acerca de la dualidad del ser humano, de la bondad y de la transformación del hombre. 
Si este artículo fue de tu interés, compartilo mencionando su fuente: www.kiai-ac.blogspot.com

domingo, 11 de septiembre de 2011

Practicante del Bushido y el Arte.

Kunoichi jSan

Nuno, es ilustrador, diseñador y músico, amante del Bushido y de los Sueños sin límite.  Actualmente trabaja en el diario La Nación en Argentina.
Sus ilustraciones y diseños han sido publicados en diversos diarios y revistas del país, en afiches para obras de teatros y tapas de discos. Sus ilustraciones han sido distinguidas con el premio a la excelencia, otorgado por la Society of News Design y distinguidos con el Premio de Plata de dicha sociedad en el año 2008. Sus obras reflejan una mezcla de sueños y espíritu marcial y emanan en un despliegue de  imaginación y audacia propia de un practicante del arte de la conexión interior. Exponemos dos obras y dejamos sus links web para que puedan continuar conociendo su asombrosa colección. La Society for News Design (SND) es una organización internacional de profesionales de los medios de prensa y comunicadores visuales - Fundada en 1979, es una entidad sin fines de lucro, con cerca de 1.500 miembros en todo el mundo.  
Taller de ilustración editorial Ryu Geijutsu
La Misión de la Society for News Design es mejorar la comunicación en todo el mundo a través de la excelencia en el periodismo visual. A tal fin, la Sociedad promueve los más altos estándares éticos en todas sus actividades. Nuno ha sido premiado por esta sociedad y realmente sus ilustraciones exponen las razones de esa elección, acordes con su misión.
  • Periodismo visual como una disciplina integral.
  • Educar a los periodistas sobre una base continua.
  • Celebrar la excelencia en todos los aspectos del periodismo.
  • Fomentar la innovación a lo largo de toda la industria periodística.
  • Proporcionar un foro para la revisión crítica y discusión de temas.
  • Carácter internacional y multicultural único y diverso.

SAMURAI
Podés conectarte con Nuno en Buenos Aires, en info@nunomante.com.ar - http://www.nunomante.com.ar/

sábado, 10 de septiembre de 2011

Shugyo, entrenamiento o ascesis.

En la ascesis cristiana se habla de “ejercicios espirituales”, olvidando de alguna forma a los corporales. En la ascética budista los ejercicios espirituales son inseparables de los corporales.
No encontraremos en esa tradición muchas elucubraciones teóricas sobre la relación cuerpo y mente pero sí abundantes prácticas para cultivar la unidad del cuerpo y mente, ascesis para recuperar su integración y unidad perdidas.
Práctica de Kendo.
Al decir aquí “ascesis”, estoy traduciendo la palabra japonesa shugyo. Se compone de dos caracteres que significan cultivo y práctica. Son prácticas para cultivarse a sí mismo, en cuerpo y mente. Son enteramente corpóreo-espirituales. Para estar en la verdad con el cuerpo, más que captarla con la sola mente, se entrena uno con toda la persona. Y la meta de estos entrenamientos es, precisamente, salir de sí para “poner el cuerpo en la verdad”;  liberarse de la polarización en nuestro yo superficial, para encontrarnos asentados en el yo más profundo, que conecta con la unidad del universo entero.
La palabra entrenamiento, aquí usada, podría sugerir la comparación con el deporte. Pero esta ascesis oriental queda lejos de los aspectos meramente lúdicos y, por supuesto, de los competitivos, del deporte como espectáculo. El que corre en el estadio olímpico se entrena antes para batir un record. En el arte oriental del tiro al arco no se apunta al blanco con la finalidad de dar en la diana. La meta es la integración corpóreo-espiritual del tirador. Como consecuencia, se atina en la diana, pero justamente cuando el que dispara se ha liberado por completo del ansia de acertar. Por eso se puede decir que “ello ha disparado”. Algo semejante ocurre en la contemplación. No se va a la meditación para obtener la iluminación.Viene como resultado y como don.
El camino de las artes marciales en Japón ilustra esta concepción del camino corpóreo y espiritual.Ken es la espada y Ken-jutsu la habilidad o técnica de manejarla. Pero el arte de la esgrima japonesa no se llama Kenjutsu o técnica de la espada, sino - Kendo -, es decir, camino de la espada. Camino es la traducción del japonés do. Chado es el camino del té; Shodo, el camino de la caligrafía; Aikido, el camino de un combate en que nos acoplamos con la fuerza y el ánimo del adversario.
En el caso de la esgrima japonesa, se le comprendió más como arte que como técnica: un camino para lograr el dominio de sí mismo corporal y espiritualmente. Entendido así, el dominio de la espada ya no es un recurso para vencer el enemigo; se ha convertido en una especie de arte de saber vivir y morir, en vez de ser una técnica para matar o evitar que le maten a uno. El maestro de esgrima debería ser, en ese camino, un dueño del control de sí, para ponerse al servicio de la compasión hacia los demás.
Este sentido del camino es el de un sendero corpóreo-espiritual hacia la sabiduría. La sabiduría así adquirida no es monopolio de un saber filosófico independiente de lo religioso, ni de una espiritualidad desconectada de lo corpóreo. La verdad a la que se llega por esa sabiduría no será nunca el resultado de haberse puesto a pensar cómo es el mundo, sino que consistirá más bien en un modo de estar y de ser en el mundo. Dicho de otro modo, un modo de dejarse ser y dejarse estar a través del cuerpo en la verdad. Adaptación de http://www.filosofiayliteratura.org. Si este artículo ten interesó reenvialo mencionando su fuente.